domingo, 21 de julio de 2013

Un temor fundado



Temo que sea el comienzo en Venezuela de las matanzas de opositores como las que se llevaron a cabo en Rusia (75 millones), y en Cuba (un número proporcional).
Cuando se instaura un régimen comunista, lo primero que piensan es en eliminar todo vestigio de pensamiento con libertades como la libertad mercado y de expresión, para esto, contemplan 2 vías, la 1a. esperar 3 ó 4 generaciones adoctrinando constantemente a los nuevos nacidos, hasta que aquellos que conocieron la libertad mueran junto con sus conocimientos y sus memorias sobre ésta, de esa manera, tratan de evitar al máximo la oposición, pero esta manera tiene muchos inconvenientes porque lleva mucho tiempo y porque no es radical, es decir, siempre habrá alguien que recuerde "lo que decía el abuelo". La segunda forma es la mencionada en la primera frase de este escrito: matar a todo el que se oponga al nuevo régimen, es decir, al nuevo orden, eso es lo que me temo que pueda estar comenzando en Venezuela. Por cierto, el encargado de estos genocidios en Cuba, fue un extranjero comisionado por Fidel para eliminar a la oposición, se le conocía como “el Carnicero de la cabaña”, un lugar en el que el juicio político se hacía por este sólo hombre, quien fusilaba de 10 a 15 personas diarias, sin juicio (pero sí con muchos prejuicios), quien mataba por sospecha, mataba homosexuales, evangélicos y opositores sin miramientos ni piedades. Ese tipo, para quienes no lo sabe aún, se llamaba Ernesto Guevara, conocido como el Ché Guevara, un asesino homofóbico que despreciaba a la gente ignorante por su condición, y que, contrario a la propaganda castro comunista, no era un héroe de una romántica revolución, sino un asesino a sangre fría a quien le fascinaba matar y matar, esa era la verdadera razón por la que estaba en las guerrillas.

Basado en el siguiente artículo:


Ocho personas muertas fue el saldo de un ataque de sicarios ocurrido la madrugada de ayer en Caicara del Orinoco, específicamente dentro de una casa del urbanismo General Manuel Cedeño, conocido como Cumoto, del sector El Hueco, en el municipio Cedeño.
Consternación, rabia y dolor expresaron los pobladores, asegurando que se trata del crimen con más número de víctimas que recuerden en esa jurisdicción.
Entre los fallecidos está un adolescente que fue identificado como Pedro Rafael Morales, de 16 años, hijo de un pastor evangélico. Los otros asesinados son: Wilkar Adrián Rodríguez, Manuel Prieto Pérez, ambos de 18 años, además de Yonny Enrique Ferrer Peralta, de 35 años, quien era operador de máquinas pesadas de la Alcaldía del municipio Cedeño; también murieron Nelson Antonio Sánchez Álvarez, de 19, Dennys Ávila Oliver, de 28, Rubén Alexander Cavío González, de 20 y otro ciudadano que hasta ayer no había sido identificado, y presuntamente reside en San Félix.


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